Mi vida (no del todo) perfecta

Ficha técnica
Título: Mi vida (no del todo) perfecta
Autor: Sophie Kinsella
Editorial: Lince ediciones
Nº de páginas: 346

SINOPSIS

Katie Brenner tiene veintiséis años y una vida perfecta: un apartamento en Londres, un trabajo glamuroso y un perfil de Instagram fantástico. Pero la realidad no es tan maravillosa como parece: vive de alquiler en una habitación diminuta donde no hay espacio ni para un armario y cada día emprende un eterno trayecto en transporte público para llegar a su puesto de administrativa en la empresa de comunicación donde trabaja. Lo que comparte en Instagram no es su verdadera vida, pero tiene la esperanza de que un día sus sueños se hagan realidad.
Su vida (no del todo) perfecta se derrumba cuando su jefa Demeter, quien sí parece tener todo lo que una puede desear, la despide. Katie pierde la esperanza y se ve obligada a regresar a su hogar en el campo de Somerset, donde ayudará a su padre a llevar el nuevo negocio de turismo rural. Pero todo cambia cuando Demeter y su familia llegan para hospedarse. Katie cree que ha llegado su oportunidad, pero no puede evitar preguntarse si debería vengarse de la mujer que arruinó sus sueños o si es mejor intentar recuperar su trabajo. ¿Es realmente la vida de Demeter tan fabulosa? Quizás ambas tengan en común más de lo que creen. ¿Y qué pasa si al fin y al cabo ninguna de las dos tiene una vida perfecta? 

¡Hola, gentecilla! Hoy os traigo la reseña de "Mi vida (no del todo) perfecta", de Sophie Kinsella, una autora que, ya os adelanto, me ha dejado con mil ganas de seguir leyendo todo lo que se haya publicado de ella. 

Esta novela en concreto nos cuenta la historia de Katie Brenner, una chica que adora Londres y que cuando consigue el sueño de ir a vivir allí, comprueba que los sueños nunca se cumplen tal y como los deseamos. A su mejor amiga de la universidad, Fi, la vida le sonríe en su estancia en Nueva York, mientras que a Katie las cosas no le van del todo bien. Su vida en Londres no es lo que había pensado. Está viviendo en un apartamento donde casi no caben sus cosas y con un compañero demasiado empeñado en enseñarle los músculos que debe mantener para su canal de Youtube. Alan es un chico muy pesado que saca de quicio a Katie. Por si no fuera poco, tiene que soportar el infortunio también en el trabajo, pues su jefa, Demeter, le hace la vida imposible, le manda hacer tareas humillantes (como teñirle las raíces del pelo) o no escucha jamás sus sugerencias que pretenden desarrollar todo el talento que lleva guardado. 

      

A pesar de esto, Katie Brenner es una mujer optimista, que todavía sueña con que su vida pueda mejorar y con llegar a alcanzar la vida fabulosa que imaginaba que tendría en el céntrico Londres. Para esto se empeña en hacerse llamar Cat, avergonzada con su nombre de apariencia granjera. Cat es un nombre más 'finolis', más moderno, o eso cree ella. Tiene un perfil de Instagram donde cuelga fotos edulcoradas, que pretenden mostrar esas cosas que desearía que le sucedieran de verdad. Tener un novio fantástico, muchas amigas con las que salir de fiesta, una jefa amable, ropa glamourosa. Pero la realidad es que a duras penas puede llegar a fin de mes, y la habitación diminuta en la que vive es lo único que puede permitirse. 

Todo cambia cuando conoce a Alex Astalis, a quien confunde con un becario, pero por desgracia, es algo así como el jefe de la propia Demeter, y corre el chisme por toda la oficina de que son amantes. Katie empieza a fantasear con él en cuanto lo conoce, y la cosa se le va un poco de las manos... hasta que Demeter la despide inesperadamente. A partir de aquí, la vida de Katie Brenner cambia y se ve obligada a renunciar al sueño londinense e irse a vivir a Somerset con su padre y con Biddy, la nueva novia de este. 

Katie la va a liar parda, literalmente, cuando descubre que Demeter y su familia irán a parar al mismo albergue que está organizando con su padre. Podrá ver desde dentro a la perfecta familia de su ex jefa y descubrir, quizás, que Demeter no es tan feliz como parece. 

Y hasta aquí os puedo contar, esta es una historia muy divertida, que tiene un mensaje precioso y creo que bastante necesario en los tiempos que corren, que son la utilización de las redes sociales, y una historia tierna por el medio de tanta situación desternillante. 

La pluma de Kinsella me ha encantado. Escribe de una manera muy sencilla, sin caer en descripciones densas ni en florituras. Va directa a lo que quiere expresar en cada momento y todo diálogo y situación es muy acertado en la historia. Es la clase de libros cuya lectura te deja feliz. He terminado de leer con una sonrisa en la cara. 

El mensaje que quiere transmitir me parece precioso porque muestra la otra cara de la moneda, lo que podemos no estar viendo de una persona, y por tanto, juzgando de manera errónea. Por otro lado, es un mensaje necesario, desde mi punto de vista, para comprender el daño que hacen las redes sociales y los malentendidos que genera, a veces, una foto que parece perfecta: nunca sabemos el sufrimiento que puede estar padeciendo la persona que está detrás, porque una foto nunca lo dice todo.  

Los personajes me han encantado, me ha sorprendido mucho el cambio de personalidad que he descubierto al conocer más a Demeter y escapar del rol que proporcionaba al lector el punto de vista de Katie y las propias redes sociales. He pasado de detestarla a adorarla, es un personaje muy carismático, que no sabía como afrontar las cosas hasta que le enseñaron cómo hacerlo. Katie es fundamental y me encanta como protagonista, es un mujer luchadora, muy divertida y sagaz. Y qué decir de Alex Astalis, me he enamorado de ese hombre. Es un chico inseguro en el fondo, que nunca se ha enamorado y que actúa como un niño pequeño la primera vez que le sucede. A veces no sabemos cómo afrontar las cosas que nos ocurren cuando no estamos dispuestos a admitirlas. 

En resumen, tanto los personajes, como la trama y la pluma de la autora, me han cautivado, me he divertido mucho con algunas escenas, y me quedo con mensajes positivos y alentadores tras su lectura. Me he sentido identificada con Katie en multitud de ocasiones. Me quedo con muchísimas ganas de seguir leyendo a esta autora. 

"Se me escapa una risa aguda que me hace encogerme de vergüenza y la transformo en una tos mal disimulada. (Nota mental: no reír cuando esté cerca de Demeter. Demeter nunca se ríe. ¿Es Demeter capaz de reír?)". 

"No es que mienta. He estado en todos los sitios de los que cuelgo fotos, aunque no me haya podido permitir tomar ni un chocolate en ellos. Es solo que prefiero no dedicar demasiado tiempo a reflejar las cosas de mi vida que no me gustan, como el largo trayecto hasta el trabajo o los altos precios o el tener que guardar todas mis cosas en una hamaca. Por no hablar de los huevos revueltos con suero lácteo sabor vainilla o de compañeros de piso repulsivamente lujuriosos. Y el tema es que se trata de algo a lo que aspirar, algo que me de esperanzas. Un día, mi vida será como mis publicaciones de Instagram. Lo será". 

"-Demeter-le digo con cautela mientras nos alejamos del establo-. ¿Estás... bien?

-¡Pues claro que estoy bien!-dice sin mirarme a los ojos-. Solo estoy un poco cansada, eso es todo. Siento haber perdido el control. Qué vergüenza. No es nada típico en mí.

Tiene razón. No lo es; al menos no de la Demeter que yo conozco. Pero, ¿y si hay una Demeter distinta de la que no sé nada?, pienso durante todo el camino de vuelta a la granja". 

"Mi vida real en Londres. Lo del piso en Catford, lo de la hamaca, lo de las cajas de suero de Alan. Lo de salir de compras con Flora y entrar en pánico por los precios y escapar y que me confundiesen con una sintecho. Las dos acabamos tronchándonos de la risa y recuerdo que una vez hace tiempo pensé: <<¿Es Demeter capaz de reír?>>. Pues sí, es muy capaz. Cuando hay algo de lo que reírse". 

"Soy lo que soy. Lo que me entristece es haber tardado tanto en darme cuenta". 

Mi puntuación

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5/5